Aprovechar las vacaciones para educar en valores

Qué hacer

• Trabajar en los valores que queremos aportar a nuestros hijos
• Dedicar un espacio a cada uno de ellos por separado para tratar el área que queramos mejorar de forma personalizada
• En vacaciones no debemos olvidarnos de exigirles responsabilidades y colaboración aunque con unos horarios más flexibles
• Trabajar en el desarrollo de su creatividad preparando actividades plásticas (pintura, collage, papel maché, maquetas, pulseras, creación de álbumes de fotos, etc…)
• Fomentar el hábito de la lectura
• Hacer ejercicio toda la familia. Es un momento ideal para salir todos en bicicleta o pasear por el campo
• Es un momento perfecto para fomentar el valor de la solidaridad
• También podéis aprovechar el tiempo libre para hacer limpieza en casa. Un trabajo colaborativo y una experiencia que puede acabar enseñando los valores de la importancia del reciclado, llevando los objetos inservibles al punto limpio o incluso para fomentar la solidaridad llevando los juguetes o libros que no usen tus hijos a una ONG o una parroquia que los distribuya a los niños sin recursos.
• Podéis planear una tarea semanal que les otorgue un privilegio especial: como organizar los armarios.
• Hacernos con una guía cultural del municipio en el que estamos para estar al día de los eventos culturales programados durante nuestra estancia, sobretodo de los que podamos acudir en familia: obras de teatro, conciertos, exposiciones, etc…

• Podéis alquilar películas con las que aprendan valores (con diferentes temáticas) y luego debatir en familia lo que visteis en la película.
• Podéis escuchar música juntos y descubrirles música de otras décadas.
• Es un momento ideal para hacernos propósitos y cumplirlos.
• Los hijos pueden participar en la preparación de las comidas y cenas aportándoles datos sobre la importancia de una comida sana rica en fruta y verdura y huyendo del típico picoteo entre horas. Preparad juntos menús equilibrados de verano.

Qué no hacer
• Permitir que pasen demasiadas horas enfrente del televisor.
• Permitir que pasen demasiadas horas jugando a videojuegos sin moverse del sillón.
• Permitir que pasen demasiadas horas frente al chat, la mensajería instantánea o las redes sociales.
• No supervisar la navegación por Internet.
• Dejarles que pasen las horas sin hacer nada.
• Dejar totalmente de lado los estudios y recordar lo estudiado en el curso con los cuadernos de vacaciones y navegando en Internet por sitios en los que los hijos podrán aprender jugando a través de divertidas actividades on line.

• No hablar con ellos.
• Permitir que no haya ninguna clase de horario ni de actividad en familia ni de actividad colaborativa en el espacio común de vacaciones.
• Abusar de la comida basura y las golosinas.

Jugar, jugar, jugar
De una cosa que no nos podemos olvidar durante las vacaciones es de jugar con nuestros hijos. A través del juego nos metemos en su pequeño mundo y descubrimos qué es lo que les gusta y les hacemos sentirse especiales, importantes y queridos.

Aunque a veces el juego puede ser fuente de discusiones ya que hay a quien le molesta más perder. Es el momento perfecto para ayudarles a gestionar sus emociones y a enseñarles que algunas veces se gana y otras se pierde y que tienen que respetar las normas y el resultado.

• Juegos outdoor

El clima nos es favorable para practicar juegos en el exterior que desarrollen sus habilidades. Los juegos deportivos en los que se juega en pareja o en grupo fomentarán el valor del trabajo en equipo. Juegos para practicar en familia: tenis, golf, bicicleta, baloncesto, voleyball, palas en la playa, pin pon, fútbol, etc…

• Representaciones teatrales
Con los más pequeños podemos hacer teatro de títeres representando cuentos clásicos o incluso obras improvisadas.

• Juegos de mesa Os podéis llevar un juego de mesa a la hierba de la piscina. Juegos recomendados: el dominó, la oca, el parchís, el trivial, el pictionary, juegos de cartas, etc… Estos juegos os ayudan a enseñarles a tomar turnos y a ganar y a perder.

• Juegos tradicionales Recupera juegos de nuestra infancia. Verás cómo despiertas la curiosidad de tus hijos. Las canicas, la goma, la comba, la peonza, el rescate, el escondite inglés, la rayuela, etc…

• Juegos en el agua El agua del mar o el de la piscina nos brinda la oportunidad de jugar con nuestros hijos en un medio refrescante y divertido. Juegos recomendados: watervoleyball, waterfútbol, baloncestowater, balonmanowater, buceo, piragüa, etc…

• Juegos para fomentar la atención Podemos hacer un gran puzzle, un rompecabezas o juegos de construcción, una maqueta de un barco o de un dinosaurio. Son juegos para los chicos inquietos para que tengan un momento tranquilo favoreciendo su capacidad de concentración y la paciencia.