La ilusión por los Reyes Magos no es sólo un sueño infantil. Es algo que nos estimula a todos, que alegra también a los que ya no somos niños. Tenemos la mágica oportunidad de volver a la infancia: a la inocencia, a la alegría, a la sencillez.
Recordamos en estos días aquellas palabras tan conocidas: "Si no os hacéis como niños, no entraréis en el Reino". Las pronunció Jesús, con una dulzura infinita. Y es una pena que algunos -muchos- las hayan olvidado.
Que los Reyes Magos nos traigan inocencia, alegría y amor en cada día del nuevo año. Porque este año tendremos, sin duda, muchas oportunidades de volver a ser niños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario